Este año 2013 se cambio la normativa
que regula la instalación de los denominados Lomos de Toro, para homologar a
nivel nacional la construcción de estas herramientas viales y prevenir así
accidentes de tránsito.
La nueva normativa dispone que
los lomos tengan un diseño parabólico con una pendiente suave que reducirá sus
alturas de 9 a 7,5 centímetros, minimizando así los daños hacia los vehículos y
también hacia las personas.
Esto porque han surgido una serie de estudios médicos
en la materia que han demostrado que los resaltos dañan el cuerpo humano en su
zona cervical, originando discopatía y deterioro del complejo ligamentoso de la
columna cervical que luego llevara a la osteoartrosis de la columna.
Esto se ve agravado por el alto número
de ellos que se coloca en forma contigua, y la asociación con otros baches en la vía como son resaltos de asfalto
y eventos de variada profundidad.
La regulación nacional de la
construcción de los lomos de toro buscara disminuir los accidentes de tránsito,
pero debe ser usada con criterio ya que no es bueno cambiar un mal por otro.
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